4 claves para eliminar los microplásticos de tu vida
- Textiles, utensilios de cocina, cosméticos, botellas… Te contamos 4 claves para eliminar los microplásticos de tu vida a la espera de que líderes de medio mundo se pongan de acuerdo para firmar un tratado para detener la invasión del plástico.
Los microplásticos son pequeñas partículas de plástico, de menos de 5 milímetros de diámetro, que se encuentran en el medio ambiente. Se crean de dos formas: una es por la degradación de residuos plásticos más grandes (como botellas o neumáticos), que los liberan con el propio roce sobre superficies, o bien se van descomponiendo por el sol, la sal, etc. y acaban transformándose en trocitos mucho más pequeños; y la segunda es porque se fabrican para añadirlos a productos, como los exfoliantes faciales o los detergentes.
Están en todas partes
A simple vista no los podemos ver, pero si pudiéramos, nos daríamos cuenta de que están EN TODAS PARTES. Se han encontrado microplásticos en el aire que respiramos, la comida que comemos y bebemos, apareciendo en los órganos e incluso en la sangre. Se estima que al año “se nos cuelan” unos 250 gramos de microplásticos en el cuerpo humano. En el medio ambiente ya no hay casi ningún lugar libre de microplásticos.
«Se han encontrado microplásticos en el aire que respiramos, la comida que comemos y bebemos, apareciendo en los órganos e incluso en la sangre»
Tortugas atrapadas en anillas de refresco, pájaros con globos en el estómago, ballenas varadas con un estómago lleno de basura plástica, islas de plásticos en varios mares y océanos, altas concentraciones de microplásticos en el océano, microplásticos en sal de mesa, en placentas humanas, en nuestro organismo… La contaminación por plásticos y microplásticos es una pandemia silenciosa, que no solo afecta al medio ambiente, sino también a nuestra salud a causa de su potencial tóxico, inflamatorio y neurodegenerativo.
«La contaminación por plásticos y microplásticos es una pandemia silenciosa, que no solo afecta al medio ambiente, sino también a nuestra salud»
Para acabar con este problema, estas semanas se va a negociar en Suiza el Tratado de los Plásticos que quiere poner fin a la producción de petróleo para producir plásticos (entre otras cosas). Pero mientras políticos y políticas deciden si deben seguir invadiendo el planeta de plásticos aquí te dejamos algunas maneras para luchar contra los microplásticos en tu vida.
4 claves para eliminar los microplásticos de tu vida
- Textiles para el hogar y para ti: aquí, los microplásticos existen por el poliéster. El poliéster es una pequeña fibra de plástico, que se desprende con el uso, es decir con el roce de estas prendas y también en cada lavado. Para evitarlos hay que sustituir está fibra por fibras naturales, como el algodón, el lino, la lana, etc. ¡Ah, y lo mismo pasa con el poliéster reciclado! Aunque el producto contenga un porcentaje de poliéster reciclado, sigue generando microplásticos que pueden ir directos a tus pulmones o al océano.
- Las tablas de cortar y otros utensilios de cocina. Cada corte que hagas hace que pequeños trozos de plástico que tú no ves salgan desprendidos y, en el mejor de los casos, queden flotando por tu cocina o tu comida. Pásate a las tablas de madera o metal, no sólo para cortar sino en todo lo que puedas en tu cocina.
- Los cosméticos y jabones: en este caso los microplásticos se añaden “a posta” en el producto para que su fricción haga el trabajo del jabón o del exfoliante o incluso para que adquiera determinada textura. Pero ya hay alternativas naturales que hacen un efecto similar. Por normativa en España y Europa están prohibidos, pero la ley aún no ha llegado a todos los productos. Esto no pasa en otros países o si el producto lo compras fuera. En líneas generales, los puedes evitar leyendo la etiqueta y huyendo de los siguientes nombre: AC, ACS, PA, PMMA, PEG, PQ, Dimethicone o Methicone entre otros.
- Las botellas de plástico NO. Las botellas de plástico liberan microplásticos al producto que hay en su interior. Sí, aunque la acabes de comprar. Además, no nos cansaremos de decirlo, las botellas de plástico NO se deben rellenar. Liberan microplásticos, más de los que ya han liberado en origen, y además liberan productos químicos tóxicos para tu salud, sobre todo si se calientan. Y ya que estás leyendo esto, tampoco calientes tu comida en un táper de plástico: pásalo a un plato, que no cuesta tanto, o bien usa un táper de cristal. Para la botella, ya sabes: botella reutilizable, que no sea de plástico y mejor si es de acero (es decir que el interior no tiene color).
Los microplásticos no son solo un problema ambiental, sino un desafío sanitario global que necesita atención inmediata. ¡Actúa hoy por un futuro libre de microplásticos! Súmate a la lucha cambiando tu consumo y alza la voz por tu salud y la del planeta.
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