Mural gigante de Greenpeace por el Día de las Ciudades
El domingo pasado aparecía en Valencia un gran mural, donde se veía una mano mirando un móvil y se podía leer: “La vida es otra cosa”. Hoy en el día internacional de las ciudades te explicamos por qué.
Hace meses Greenpeace lanzó su campaña Neopolitan, dónde pusimos de manifiesto la necesidad de un cambio en el modelo de consumo de las ciudades para revertir el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Porque en las ciudades es donde más gente vive. El 80% de la ciudadanía española ya vive en ciudades y las urbes se han convertido en las catedrales del consumo (de agua, energía, contaminación por transporte, productos de usar y tirar, de generación de residuos…). En 2007 se superó por primera vez el porcentaje de personas que viven en ciudades, frente al medio rural, y se espera que siga aumentando. Para 2050, más del 66% de la población mundial vivirá en ciudades y, casi el 15%, en megaciudades de más de 10 millones de habitantes. Es evidente que tenemos mucho que decir y hacer en nuestras ciudades.
Con el mural que el artista valenciano Escif pintó en Valencia en la pared del Centro oficial de Estudios Superiores Barreira A+D queremos que las personas reflexionen sobre su consumo y sobre qué ciudad queremos, porque sí se puede cambiar. A veces las competencias no son claras, y quedan difusas, pero que las ciudades tomen medidas puntuales las posiciona a la cabeza de un liderazgo medioambiental. Cada vez más ayuntamientos actúan frente a la inactividad o lentitud de su gobiernos estatales.
Ciudades como Londres o Berlín que han puesto una fecha para regular el fin del gasoil en en centro de las ciudades o Malmö, en Suecia, donde a sus 38.000 escolares un día a la semana se les ofrecen solo opciones vegetarianas en el menú, al igual que en Liverpool donde en sus 41 colegios los lunes no se sirve carne. O como en San Francisco dónde se ha prohibido la venta en suelo público de agua embotellada en plástico y de pajitas en restaurantes, bares y cafés.
Necesitamos que las ciudades sean más humanas, saludables, eficientes, menos contaminadas, con menos residuo. Espacios donde la calidad de vida, la reparabilidad, el intercambio, las nuevas economías y la comunidad tengan un peso fundamental. Ciudades para las personas.
¿Te unes a ser Neopolitan? #CitiesDay #DíadelasCiudades
Comentarios
Estoy absoluamente de acuerdo con el proposito de la campaña, como no puede ser de otra manera. Pero, en mi modesta opinion, el gafiti-eslogan no es nada claro. De hecho me sugiere una critica al "nuevo modelo de relaciones" que hemos adoptado, basado en las nuevas tecnologias, mas que al consumismo y el tipo de sociedad basada en él.
Es una critica contructiva. Lo importante es hacer pensar a la gente sobre a donde nos llevan nuestros actos y si estamos de acuerdo o con con ello, y no asumirlo como la unica opcion. Y eso supogo que lo consigue. Todo lo que se hable de estos temas es poco, porque parece que los humanos somos "duros de oido" por naturaleza y necesitamos que se nos repitan mucho las ideas para que aceptemos plantearnoslas. Gracias a todos por todo vuestro esfuerzo.
Estoy de acuerdo, el cartel está muy bien, es espectacular, pero al mirarlo he pensado en otras cosas antes que en el consumo responsable.
Quiero hacer una observación sobre el fin del gasoil en el centro de las ciudades:
Todos los motores de explosión (los de encendido provocado, también llamados de gasolina y los de encendido por compresión, también llamados diésel o de gasoil) son contaminantes, así que cuantos menos coches haya, mejor, pero de los dos, el que más contamina es con diferencia el de gasolina, y ello por dos motivos: en primer lugar porque consume más combustible, y cuanto más combustible consume, más gases produce y más contamina.
En segundo lugar porque los motores de gasolina producen óxidos de nitrógeno que son altamente tóxicos aunque sean invisibles y no tengan olor.
Los motores diésel, para su desgracia, cuando no están bien reglados, producen gases negros, que son muy visibles, sucios, sofocantes y producen mal olor, pero es por la carbonilla que producen, que es molesta pero no tóxica.
No hay que respirar los gases de ningún motor, pero los más tóxicos son, con mucha diferencia, los de gasolina, así que no tiene mucho sentido castigar al menos contaminante en beneficio del que contamina más.
Añadiré una cosa: yo nunca cojo el coche en la ciudad. Siempre voy en bicicleta, andando o en transporte público. Recomiendo a los que lean esto que hagan lo mismo. Ganarán en salud, en bienestar, y ganarán también los ciudadanos de su ciudad.
Un saludo.