Yo cambio mi ciudad con mi consumo
Hace años llegué a Madrid, procedente de un pueblo grande. Vine con una maleta cargada de sueños y me dí de bruces con la realidad. Me choqué de frente con un gran monstruo de ciudad en el que podía encontrar cualquier cosa, todo tipo de ocio, espacios donde puedes consumir de todo…. Me llevé también una bofetada de individualismo, tráfico, contaminación, lo difícil que es andar, la ausencia de una ciudad pensada para las personas y me dije: “yo de esta gran ciudad me voy”. Pero aquí sigo. Y si yo sigo aquí y también las miles de personas que viven en ciudades muy grandes, grandes, medianas y pequeñas, ¿por qué no cambiarlas? ¿por qué no hacerlas más amables? ¿más humanas? ¿más sostenibles? Quiero otra ciudad y puedo cambiarla, cambiando mi consumo.
En 2050, el 66% de la población mundial vivirá en ciudades, y de ellas, el 14,4% lo hará en megaciudades, enormes urbes con más de 10 millones de habitantes. En España, actualmente, el 80% de la población está en ciudades y es un porcentaje que crecerá.
Hoy en día las ciudades tienen un modo de vida predominantemente insostenible. Es donde más agua y más energía consumimos, donde se contamina más por el transporte, donde se consumen más productos de un solo uso, donde consumimos más alimentos al albergar más población y donde se generan más residuos (como las basuras), entre otros. En nuestras ciudades, prima lo rápido y lo cómodo y un ritmo de vida frenético que da la espalda a cualquier estrategia medioambiental y que ignora lo que pasa fuera de sus fronteras. Consumimos guiadas por alcanzar un status social o por el mero hecho de consumir, por inercia o, porque “es normal”. Es un modelo de vida insostenible.
Hoy se extraen un 50% más de recursos naturales que hace 30 años, una media de 60 mil millones de toneladas de materias primas al año, el peso de 41.000 edificios como el Empire State Building. Si la población sigue creciendo vamos a necesitar cerca de 3 planetas.
Consumir de manera sostenible, racionalizando los recursos, cambiará estas “catedrales” del consumismo, cambiará nuestro modo de vida, y nos ayudará a luchar contra el cambio climático, contra la pérdida de biodiversidad y mejorará nuestra salud y la del planeta. Tu consumo, tu ciudad, pueden cambiar el planeta.
Greenpeace ha elegido diez ciudades para que se conviertan en ciudades sostenibles y que arrastran a otras ciudades a cambiar el planeta. En ellas queremos cambiar el consumo de los plásticos de un solo uso, eliminándolos de los mercados y favoreciendo un sistema de retorno de envases (SDDR), reducir la moda rápida primando los negocios de reparación y segunda mano y la moda sostenible, queremos que las ciudades promuevan una dieta sostenible reduciendo el consumo de carne y promoviendo la agricultura ecológica y queremos ciudades con un aire más limpio, para eso hay que reducir el coche en las ciudades y fomentar el transporte público, la bici o el poder andar. Buscamos ciudades que generen un consumo sostenible para hacerlas ciudades para las personas.
Gracias
#YoCambioMiCiudad #SmartCities
– Informe: Tu consumo lo cambia todo