Nuevo informe de Greenpeace: “Carrera climática contrarreloj”
España, entre los países del mundo más afectados por las consecuencias del cambio climático
- España se calienta a un ritmo más rápido que la media mundial: se prevé una subida de 2 ºC en los próximos 20 años
- Nuestro país será más árido y experimentará sequías diez veces peores que las actuales
- La temporada de incendios se alargará, con el riesgo de que sean más grandes e intensos
- Greenpeace pide a la ciudadanía que el 23J vote por propuestas dirigidas a afrontar la emergencia climática, por una vida mejor hoy y para el futuro
Madrid, 5 de julio de 2023.- España ya se encuentra entre los países del mundo que más está sufriendo los impactos del cambio climático. Así lo asegura el informe que Greenpeace ha presentado hoy: “Carrera climática contrarreloj: cambio climático y eventos meteorológicos extremos en España” elaborado por la Unidad Científica de Greenpeace en la Universidad de Exeter (Reino Unido) donde, a través de una revisión de las publicaciones científicas existentes hasta el momento, se detallan las tendencias y previsiones de los impactos futuros del cambio climático y los eventos meteorológicos extremos en España.
“El camino que emprendamos tras el nuevo ciclo electoral tiene que conducirnos a una sociedad que ponga en el centro el bienestar y esté preparada para el futuro que predice la ciencia. Las proyecciones indican que, si no se reducen drásticamente las emisiones que causan el calentamiento global, nos espera un país más caliente, más seco, más árido, más inflamable, con más inundaciones e incendios de alta intensidad y afectado por la subida del nivel del mar”, ha declarado Maria José Caballero, responsable de Respuesta Rápida de Greenpeace.
«Los datos del informe muestran la urgencia de reducir las emisiones y afrontar la emergencia climática tomando medidas ambiciosas, con las que los partidos se deben comprometer. Debemos exigir propuestas de políticas climáticas no solo porque nos espera un país más caliente y con más inundaciones e incendios, sino porque además estas medidas nos permitirán alcanzar una vida sostenible, con futuro y con más oportunidades para todas”, añade Caballero.
Tendencias y proyecciones climáticas en España
El ritmo de calentamiento en España es, y continuará siendo, más rápido que la media mundial. Se espera un calentamiento de 2 °C en los próximos 20 años a menos que se realicen reducciones inmediatas y severas en las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Temperatura y olas de calor
- Por cada grado adicional de calentamiento global, la respuesta en España será de hasta 1,5 °C, con aumentos más pronunciados en zonas del interior del país.
- En los escenarios con mayores emisiones de gases de efecto invernadero, se prevé que el calentamiento supere los 4 °C a finales del siglo XXI.
- Se espera que aumenten las zonas del país que experimentarán entre 1 y 10 días de condiciones extremadamente cálidas y húmedas al año.
Sequía
- España experimentará sequías diez veces peores que las actuales. En el sur de Europa, más de un tercio de la población estará expuesta a la escasez de agua si la temperatura aumenta 2 °C. Este riesgo se duplica a 3 °C.
- En grandes áreas del Mediterráneo se prevé que la frecuencia de sequías extremas sea entre un 150 % y un 200 % más probable si la temperatura global aumenta 2 °C.
- Los períodos de sequía y calor reducirán la disponibilidad de agua dulce y amenazarán los rendimientos agrícolas, conduciendo al aumento de los precios de los alimentos.
Incendios forestales
- Junto a los cambios socioeconómicos en las últimas décadas (abandono del medio rural y aumento de superficie forestal), el riesgo de tener grandes e intensos incendios se agrava con el cambio climático hacia episodios más peligrosos, rápidos e incontrolables, fuera de la capacidad de extinción, con un comportamiento diferenciado.
- Se prevé que España siga siendo cada vez más calurosa y árida, con estaciones menos definidas y un alargamiento de la temporada de incendios.
Precipitaciones
- Se esperan menores precipitaciones, concentradas en menos eventos pero más intensos y, por tanto, con mayor riesgo de provocar daños.
- El volumen de lluvia (o nieve/granizo) en el día más lluvioso del año en España aumentará hasta un 10 %, y con él, el riesgo de inundaciones.
- Se prevén temporadas o años secos y lluviosos más extremos.
Olas de calor marinas
- Se prevé que la temperatura media de la superficie del mar Mediterráneo aumente entre 1,8 °C y 3,5 °C para 2100.
- Se esperan más olas de calor marinas, no sólo en el Mediterráneo, sino también en el Cantábrico y el Atlántico.
- Las olas de calor marinas y el calentamiento de la temperatura del aire disminuyen la posibilidad de adaptación de los organismos marinos, lo que podría provocar extinciones locales y cambios a gran escala en la distribución de especies.
Impactos en la sociedad
Salud
- La exposición al calor extremo puede exacerbar los problemas de salud subyacentes, con especial riesgo para grupos vulnerables como bebés y personas mayores.
- El aumento de las olas de calor y de días con condiciones extremadamente calientes y húmedas aumentarán notablemente el riesgo de muerte por hipertermia. Las tasas de mortalidad aumentan durante las olas de calor prolongadas que duran más de dos días. También aumentará la morbilidad.
- En Europa, el número de personas con alto riesgo de mortalidad se triplicará con un calentamiento de 3 °C en comparación con un calentamiento de 1,5 °C, en particular en el centro y el sur de Europa y en las áreas urbanas.
- Las temperaturas más altas hacen adecuadas más áreas para la transmisión de enfermedades por vectores tales como la encefalitis o la enfermedad de Lyme.
Economía
- Se espera que el calor extremo afecte negativamente la productividad laboral, con una pérdida generalizada de horas de trabajo de al menos un 15 %, llegando a más del 50 % en las áreas más afectadas por el calentamiento.
- Se prevé que España sea uno de los países que experimente importantes pérdidas económicas atribuibles a las olas de calor, que serán de hasta el 3 % del PIB para 2060.
Ciudades
- Se espera que las áreas edificadas, en particular en la costa, sean las más afectadas por el cambio climático y los riesgos por eventos meteorológicos extremos.
- El efecto “isla de calor” de las ciudades agravará los efectos del aumento de la temperatura; será especialmente preocupante durante las olas de calor.
- Las ciudades y los asentamientos de baja altitud, las islas pequeñas y las comunidades deltaicas sufrirán graves perturbaciones climáticas para 2100 y, en muchos casos, para 2050.
- La costa española sufrirá los impactos de un mar más cálido, aumentando el riesgo de tormentas de invierno y de olas de calor de verano.
Aumento del nivel del mar
- Los impactos derivados de la subida del nivel del mar pueden causar daños especialmente graves en el Mediterráneo debido al alto porcentaje de personas que viven en las regiones costeras (el 34 %, frente al 10 % mundial).
- El aumento del nivel del mar, particularmente en sinergia con fenómenos meteorológicos extremos como las marejadas ciclónicas, podría afectar infraestructuras críticas en la costa, como los puertos marítimos.
Agricultura
- Se espera que algunos cultivos agrícolas se vean especialmente amenazados. La producción de aceitunas se podría reducir hasta en un 15 %-20 % en Andalucía, Extremadura y Castilla la Mancha. Se esperan reducciones similares para el trigo y el girasol.
- Se prevén impactos en los rendimientos tanto para cultivos de secano como de regadío debido a los cambios en los patrones de lluvia y en la reposición de los recursos de agua subterránea.
Biodiversidad
- Las previsiones sugieren que el cambio climático alterará los ecosistemas en una medida sin precedentes en los últimos 10.000 años.
- El principal riesgo identificado en España es el de la desertificación.
DEMANDAS Y RECOMENDACIONES
- Reducir a cero las emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2040 en toda la UE y, en España, en un 55% para 2030 respecto a 1990. Llegar a un sistema eléctrico eficiente, inteligente y 100% renovable en 2030 y a un sistema energético eficiente y descarbonizado en 2040 con un despliegue de energías renovables ordenado, participativo y respetuoso con la biodiversidad y con la mitad de consumo de energía.
- Detener las nuevas inversiones y subvenciones al gas y otros combustibles fósiles y, en su lugar, dedicar los recursos a financiar un plan de rehabilitación energética de todas las viviendas para reducir la demanda de gas.
- Implementar el Plan Nacional de Adaptación frente a las amenazas del cambio climático con un presupuesto adecuado.
- Realización de más investigaciones y estudios de atribuciones que permitan determinar si los eventos meteorológicos extremos están relacionados con el cambio climático y cuantificar su mayor probabilidad de ocurrencia en y para España.
- Ampliar la protección y recuperación de ecosistemas y de especies hasta alcanzar al menos el umbral de un 30 % de la superficie terrestre y marina protegida para 2030.
- Aprobar normativa que obligue a empresas y administraciones a adaptar infraestructuras y edificios, así como a evaluar y prevenir riesgos laborales asociados al cambio climático, especialmente a las olas de calor y a las temperaturas anormalmente altas.
- Reducir nuestra vulnerabilidad al riesgo de sequía, aminorando la cantidad total de agua consumida, fundamentalmente por el regadío intensivo e industrial y luchando contra la sobreexplotación y contaminación de este valioso recurso.
- Intensificar la coordinación con las Comunidades Autónomas en la prevención de incendios forestales de acuerdo con el Real Decreto Ley 15/2022.
- Establecer un fondo presupuestario de apoyo a la prevención de incendios y gestión forestal para poder fortalecer el trabajo de todas las administraciones y actores.
- Impulsar una gestión forestal adaptativa para conformar paisajes con una diferente respuesta al fuego y su propagación.
- Aplicar el Artículo 28 del Plan Hidrológico Nacional y eliminar las construcciones e instalaciones situadas en dominio público y en zonas inundables que puedan implicar un grave riesgo para las personas y los bienes.
- Incluir el riesgo de inundaciones en todas las planificaciones urbanas y urbanísticas, tal y como indica la Ley 7/2021, de cambio climático y transición energética.
Además, Greenpeace ha presentado estos días sus propuestas para las elecciones generales del 23 de julio, bajo el lema Vota por lo que más quieras: 125 medidas para impulsar la urgente transición energética, la protección de biodiversidad, la democratización de la economía, la sostenibilidad social y ambiental de la Unión Europea y el avance en derechos y libertades para crecer en democracia y proteger el planeta.