Greenpeace abre una nueva oficina en Kiev (Ucrania)

Greenpeace ha inaugurado hoy una nueva oficina en Kiev (Ucrania). Desde la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia en 2022, Greenpeace ha estado trabajando con organizaciones aliadas en el país y ahora ampliará oficialmente sus oficinas para acelerar su trabajo en proyectos de reconstrucción ecológica, así como para investigar los crímenes de guerra medioambientales resultantes de la invasión rusa. Greenpeace también seguirá vigilando de cerca las preocupaciones de seguridad y los niveles de radiación en torno a las centrales nucleares ucranianas.

Natalia Gozak, directora de la oficina de Greenpeace Ucrania, ha afirmado: “El pueblo de Ucrania merece una presencia fuerte y vibrante de Greenpeace, para apoyar los valores activistas y democráticos frente a la guerra. Por la seguridad de la nación, Ucrania debe defender la transición hacia el abandono de los combustibles fósiles. Nuestra misión es ayudar a Ucrania a reconstruir la infraestructura social de una manera sostenible, aprovechando la energía limpia de los paneles solares y las turbinas eólicas. Estas soluciones no son sólo ecológicas, son el camino hacia un futuro resiliente y sostenible para Ucrania”.

La apertura de la oficina es otro hito en el trabajo de Greenpeace en Ucrania. Nada más empezar la guerra, las oficinas de Greenpeace en los países vecinos de Europa Central y Oriental (CEE) – Eslovaquia, Polonia, Hungría, Rumania, Bulgaria – se involucraron en el trabajo humanitario, apoyando a los aliados y las personas refugiadas. En colaboración con organizaciones ambientales locales, Greenpeace ya ha documentado la devastación ambiental de la guerra, incluida la destrucción de la presa de Kakhovka, ha analizado las crisis en la planta de energía nuclear de Chernóbil y Zaporizhia y ha implementado los primeros «proyectos piloto» de reconstrucción ecológica.

Alexander Egit, director ejecutivo de Greenpeace en Europa Central y Europa del Este, de la que forma parte la nueva oficina ucraniana, ha señalado: «En los próximos años esperamos que la Unión Europea y otros países inviertan miles de millones de euros en la reconstrucción de Ucrania. Queremos asegurarnos de que Ucrania se reconstruya de una manera más verde y resiliente y, para ello, la estricta independencia financiera de Greenpeace con respecto a la financiación estatal o corporativa es un requisito previo clave. Nuestro objetivo es apoyar la reconstrucción con energía renovable descentralizada para una Ucrania independiente, moderna y verde, ahora y después de la guerra”.

La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha tenido un enorme impacto en la energía, la alimentación, las finanzas, la biodiversidad, el comercio, la seguridad nuclear, el clima y la geopolítica, cuestiones que Greenpeace ha abordado desde entonces. La oficina de Greenpeace en Ucrania está estrechamente vinculada estratégicamente a la red de Greenpeace en todo el mundo: el fin de la dependencia de los combustibles fósiles, la restauración de la naturaleza y la exposición de los peligros de la energía nuclear son piedras angulares estratégicas para el trabajo de Greenpeace en todo el planeta. 

Mads Christensen, director ejecutivo de Greenpeace Internacional, ha declarado: «Estoy profundamente conmovido, esperanzado e increíblemente orgulloso del equipo de Greenpeace Ucrania y de todos los que han participado en el establecimiento de esta nueva oficina de Greenpeace en circunstancias tan difíciles. Nuestros esfuerzos en Ucrania ya están mostrando el camino a seguir, demostrando cómo la energía renovable puede ayudar a mantener escuelas y hospitales con energía incluso en mitad de los horrores de la guerra. Pero esto es sólo el comienzo. Cuando la reconstrucción verde se amplía, puede liberar la verdadera resiliencia de naciones enteras. Con la nueva oficina en Kiev, Greenpeace trabajará con el valiente pueblo ucraniano para construir una Ucrania verde y segura. Juntos, no sólo estamos imaginando un futuro mejor, lo estamos creando”.