Gran paso adelante de la industria salmonera para proteger las aguas de la Patagonia
La presión sobre la administración del presidente chileno Sebastián Piñera aumenta para proteger una de las regiones más bellas y biodiversas del mundo, el mar Patagónico.
A finales de la semana pasada, la comunidad indígena Kawésquar, en Chile, ganó una larga batalla legal contra la industria salmonera, que ya ha extendido la contaminación a otras regiones de Chile y planea expandirse en la Patagonia. La decisión fue tomada inmediatamente después de las acciones de Greenpeace Chile que denunciaron el daño de la industria a los ecosistemas marinos.

Activista de Greenpeace sujeta una pancarta con el mensaje «Rescata el mar Patagónico» (Rescue the Patagonian Sea), en protesta contra la expansión del cultivo del salmón en la costa chilena. Se colocó un pin de ubicación para indicar el área a proteger.
Estefanía González, coordinadora de campaña de océanos de Greenpeace Chile, ha señalado:
«El mar Patagónico es uno de los lugares más hermosos del planeta, que atrae a miles de visitantes cada año. Ninguno de ellos viene aquí a ver un océano marcado por jaulas industriales de cultivo de salmón y su contaminación asociada. La victoria de ‘David y Goliat’ de los Kawésquar esta semana es un importante paso adelante y debería ser una señal para los líderes de Chile de que es hora de detener definitivamente el avance de la industria del salmón en la Patagonia chilena«.

Activista de Greenpeace protesta con una pancarta que dice «No los dejes morir», refiriéndose a una de las especies en peligro debido a la expansión del cultivo del salmón. En el fondo, se muestra el esqueleto de una ballena jorobada pintado con luz.
La semana pasada, activistas a bordo del Arctic Sunrise, el legendario rompehielos de Greenpeace, desplegaron un inflable de cuatro metros de altura semejante a un pin de ubicación en el mapa con el mensaje ‘Mar en peligro’ en el Skyring Sound -un área que alberga numerosas especies amenazadas.- y generaron impactantes imágenes luminosas de algunas de las especies más emblemáticas de la Patagonia.
El mar Patagónico es hogar de ballenas, delfines, nutrias, focas y otros animales raros, todos ellos amenazados por la contaminación derivada del cultivo industrial del salmón.

Avistamiento de una ballena jorobada durante el tour del Rainbow Warrior en Chile.
Chile es el segundo mayor productor de salmón del mundo, más del 80% del cual es para la exportación. A medida que la industria salmonera del país ha crecido, también lo ha hecho el daño al prístino mar Patagónico. Proteger esta región ayudaría a evitar una repetición de desastres como la crisis de marea roja de 2016 en Chiloé, cuando la industria salmonera arrojó más de 9.000 toneladas de salmón podrido al océano, contribuyendo a la muerte de miles de animales marinos.
El Arctic Sunrise de Greenpeace está actualmente concluyendo un viaje de dos semanas a través de la Patagonia chilena para documentar la vida silvestre de la región, realizar investigaciones sobre la biodiversidad en la zona y revelar la contaminación y la destrucción vinculadas a la industria del cultivo.