Greenpeace pide a los gobiernos en la Cumbre sobre Clima y Energía en Madrid que apoyen un plan urgente para el abandono de los combustibles fósiles
Madrid 28 de septiembre de 2023.- Greenpeace pide a los gobiernos que acuerden un plan para el abandono rápido y justo de todos los combustibles fósiles a nivel global, en el marco de la Cumbre internacional sobre Clima y Energía de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), que reunirá el 2 de octubre en Madrid a ministros de todo el mundo. Este plan, que debería adoptarse formalmente en la Cumbre sobre el Clima de las Naciones Unidas (COP28) en noviembre, debería incluir el fin inmediato de todos los nuevos proyectos de infraestructura y extracción de petróleo, gas y carbón. Es decir, no deberá haber nuevas licencias, concesiones o contratos para la producción de nuevos combustibles fósiles, ni financiación para infraestructuras de extracción, distribución (por ejemplo, plantas de regasificación como la de El Musel en Asturias) que prolongarían el uso de combustibles fósiles.
Múltiples informes y declaraciones oficiales, como los de la propia AIE a principios de esta semana, el IPCC y las Naciones Unidas, señalan la necesidad de alejarse rápidamente de los combustibles fósiles. Para lograrlo será crucial, pero no suficiente, establecer objetivos en materia de energías renovables, reducción de la demanda y electrificación.
El paquete de compromisos para la gran coalición, que se quiere constituir en la Cumbre de Madrid para mantener el objetivo de calentamiento global al 1,5°C al alcance, tiene que incluir objetivos para un abandono de los combustibles fósiles justo, rápido y con plazos claros.
“Los líderes políticos no pueden afirmar que apoyan el Acuerdo de París y su límite de calentamiento global de 1,5°C si siguen permitiendo nuevos proyectos de combustibles fósiles durante esta década. Necesitamos un plan claro y justo, con hitos definidos, para deshacernos de los combustibles obsoletos y contaminantes que nos están matando. Aquellos que más han contaminado y obtenido mayores ganancias deben asumir la responsabilidad de apoyar a los países y comunidades de menores ingresos en su transición hacia un sistema energético justo, eficiente y 100% renovable”, ha afirmado JSara Pizzinato, del área de clima, energía y movilidad de Greenpeace.
Además, la organización pide que la Unión Europea lidere el camino fijando objetivos nacionales de abandono del gas fósil en todos los sectores para 2035, incluyendo objetivos intermedios para 2025 y 2030. De igual forma, España, en su función al frente de la Presidencia del Consejo de la Unión Europea, debe tomar una actitud de liderazgo para conseguir que todos los países acuerden en la COP28 el fin definitivo, rápido y justo de los combustibles fósiles.
Tal y como ha demostrado un reciente informe de Greenpeace, no se puede confiar en que las empresas de combustibles fósiles gestionen su propia transición. A pesar de sus promesas de emisiones netas cero y despliegue de renovables, las grandes empresas petroleras europeas continúan invirtiendo principalmente en combustibles fósiles. Estas compañías han obtenido enormes y repentinas ganancias durante los últimos años, pero en lugar de invertir más en energías renovables o eficiencia energética, muchas están reduciendo sus compromisos climáticos, como Shell y BP. A modo de ejemplo, sólo un 0,82% de la producción de energía de Repsol en 2022 fue de origen renovable y destinó el 82% de sus inversiones a su negocio de combustibles fósiles, aumentando sus emisiones en un 16% en nuestro país en el mismo año.
“Estamos en un momento extraordinario en la historia: ahora tenemos todas las herramientas necesarias para liberarnos de los combustibles fósiles, responsables de la crisis climática, pero eso no sucederá sin una fuerte dirección política y una regulación vinculante. Ahora que la Vicepresidenta Ribera convoca a ministros de todo el mundo en Madrid, la alentamos a construir una coalición fuerte a favor del abandono de los combustibles fósiles con objetivos claros, plazos ambiciosos y una transición justa. Establecer objetivos para las energías renovables y la eficiencia energética es crucial, pero no suficiente por sí solo, ya que no aborda la expansión en curso de nuevos proyectos de petróleo, gas y carbón” ha concluido Sara Pizzinato.
La Cumbre estará precedida por dos eventos que reunirán a líderes de la industria, las finanzas y la sociedad civil, el 29 de septiembre, para llevar sus voces a la Cumbre. Greenpeace participará en uno de ellos.