Greenpeace traslada al Concello sus propuestas para mejorar la movilidad de Santiago de Compostela
- Representantes de la organización ecologista se han reunido con responsables políticos para conocer de primera mano los planes municipales en materia de movilidad
- La lucha contra la contaminación, potenciar la red de autobuses y reducir el abuso del automóvil, claves para mejorar la movilidad en la ciudad gallega
- Santiago de Compostela, que registra un uso del vehículo privado superior al 40%, suspendió en el ránking de movilidad sostenible realizado por Greenpeace el pasado mes de mayo
Esta mañana representantes de la oficina de Greenpeace España y del Grupo Local de Greenpeace Compostela han mantenido una reunión en el Concello de Santiago con el concejal de Movilidad, Seguridad Ciudadana y Fiestas, Gonzalo Muíños, y el Gerente de Tussa, José Ramón Mosquera, con el objetivo de analizar las demandas que Greenpeace presentó a la ciudad gallega y conocer de primera mano los planes del municipales en materia de movilidad para la próxima legislatura.
Hasta ahora, la anterior corporación de Santiago asumió varias de las medidas en movilidad demandadas por Greenpeace, como la Zona 30 del ensanche o la instalación de ‘avanzabicis’ en los semáforos. Además, la organización ecologista exige a la ciudad gallega medidas para luchar contra la contaminación, potenciar el uso del autobús, reducir el espacio dedicado al coche en favor del peatón y promover medidas para liberar de tráfico el Centro Histórico y el Ensanche.
Desde el Concello se han expuesto las prioridades para la próxima legislatura, que consistirán en la redacción de un nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) y en un nuevo contrato para el transporte urbano, a través del cual se procederá a renovar toda la flota de autobuses y a una reordenación de líneas que corrija las carencias del servicio actual.
Greenpeace ha acogido de forma positiva los planes del Concello y espera que se materialicen en cambios visibles en la ciudad. Para el responsable de movilidad de Greenpeace, Adrián Fernández, “las ciudades son conscientes de que el vehículo particular es un modo muy ineficiente en los entornos urbanos, y por eso las calles deben rediseñarse priorizando al peatón en su día a día, y no solo como un reclamo turístico o comercial”. Greenpeace, a través de su Grupo Local en Compostela, ha ofrecido la participación de su voluntariado para la redacción del nuevo PMUS.
Movilidad sostenible, asignatura pendiente en Santiago de Compostela
El pasado mes de mayo, la movilidad de Santiago de Compostela aparecía suspensa en el Ranking de Ciudades elaborado por Greenpeace, que colocaba a la capital gallega en penúltima posición [2]. Pese al predominio de la movilidad peatonal, Santiago registra un uso del vehículo privado superior al 40%, muy condicionado por la creciente dispersión de sus habitantes hacia municipios colindantes, empujados por la presión turística. No en vano, cada día entran a la ciudad el doble de los habitantes censados, generalmente en su coche.
La elevada presencia del vehículo privado contrasta con el bajo uso del transporte público (12%) una circunstancia común de las ciudades pequeñas frente a las grandes. En este contexto, Santiago de Compostela se enfrenta al reto de priorizar el transporte público para mejorar la conexión entre barrios y con los concellos de su entorno, circunstancia que el Concello se ha comprometido a abordar en el nuevo contrato.
La redacción de un nuevo PMUS supone una oportunidad de corregir esta tendencia. Santiago presenta un centro urbano compacto, así como un bajo índice de motorización. Ambas condiciones propician la movilidad de proximidad, sobre todo a pie. Greenpeace considera que el nuevo PMUS tiene que dar prioridad a los itinerarios peatonales cotidianos, aquellos en el día a día de sus habitantes y no solo en los usos turísticos en una ciudad que afrontará una presión excepcional de visitantes en el próximo año Xacobeo.
En este sentido, uno de los ejemplos propuestos por Greenpeace es la reordenación de la Praza de Mazarelos y su entorno, donde todavía se permite el acceso indiscriminado de vehículos. La recuperación de este espacio para el peatón permitiría acabar con la frecuente congestión en una zona que ya dispone de alternativas de aparcamiento a escasa distancia, Se continuaría así con la tendencia de liberación del tráfico que ya está vigente en el casco histórico y cuyo resultado ha sido más que positivo para la habitabilidad urbana.
En 2018 Greenpeace escogió a Santiago dentro de su ‘reto Neopolitan’ sobre 12 ciudades españolas para que trabajasen sobre movilidad, alimentación y residuos [1]. Para la organización ecologista, la sostenibilidad de las ciudades es fundamental para frenar el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y las desigualdades sociales.