La actriz Inma Cuesta, guardiana de la posidonia a bordo de los botes de Greenpeace
- Greenpeace, junto a las organizaciones GEN-GOB, Oceana y Terraferida organizan el primer muestreo social o crowdsourcing de amenazas a la posidonia en Ibiza y Formentera
- Los jóvenes youtubers Melo Moreno (Yellow Mellow) y Jonan Wiergo también estarán junto con Greenpeace denunciando a los barcos que fondeen sobre praderas de posidonia
- La posidonia es la joya natural del Mediterráneo y a ella deben su color blanco las playas más paradisíacas de las Islas Baleares
La actriz Inma Cuesta ha ejercido estos días de guardiana de la posidonia en aguas baleares. Junto a los youtubers Melo Moreno (Yellow Mellow) y Jonan Wiergo, la actriz ha estado en Ibiza y Formentera este fin de semana navegando en los botes de Greenpeace para monitorizar la presencia de barcos fondeados sobre las praderas de posidonia. No han sido los únicos. Greenpeace, junto a las organizaciones Oceana, GEN-GOB y Terraferida, han llamado a la ciudadanía, empresas y turistas a participar en estas 48 horas de denuncia. Se trata del primer muestreo social o crowdsourcing de amenazas a esta joya natural del Mediterráneo.
“Las praderas de posidonia son uno de los mayores tesoros del Mediterráneo. Es nuestro deber protegerla y salvaguardarla de los peligros a los que está sometida. Me siento muy emocionada de poder ayudar a Greenpeace y al resto de organizaciones en esta importante labor. Convirtámonos en guardianes y guardianas de la posidonia”, ha declarado Inma Cuesta. Los jóvenes youtubers Jonan Wiergo y Melo Moreno (Yellow Mellow) han transmitido el mismo mensaje a través de sus redes sociales.
Con más de 100.000 años de antigüedad, la posidonia es el organismo vivo más longevo del mundo y, sin embargo, continúa siendo una gran desconocida. Esta joya natural forma un auténtico bosque sumergido en el mar Mediterráneo al que hay que agradecer, por ejemplo, el color blanco de las playas más paradisíacas de Baleares, donde se concentra más de la mitad (el 52%) de las praderas del país.
Además, entre sus numerosos beneficios, las praderas de posidonia proporcionan:
- Refugio para el desarrollo de gran cantidad de especies de interés comercial.
- Protección de la línea de costa ante la erosión por el oleaje.
- Absorben el CO2 y liberan oxígeno, actuando como pulmón del Mediterráneo.
- Contribuyen a mitigar los efectos del cambio climático.
Su relevancia para el desarrollo económico y social del país es directamente proporcional a su vulnerabilidad: una vez que se destruye, los daños pueden ser irremediables. De hecho, en Baleares se ha estimado que las praderas de posidonia aportan un valor ambiental de 4.000 millones de euros tan solo en fijación del dióxido de carbono y que cada hectárea aporta 14.000 euros al año.
“Hay días de verano que se pueden contar hasta 900 barcos atracados frente a una sola playa de Formentera. A nadie se le ocurre aparcar un camión en mitad de un bosque maravilloso de Picos de Europa; sin embargo, en las praderas de posidonia fondean barcos y yates con anclas enormes que destrozan este pulmón del Mediterráneo”, ha declarado Pilar Marcos, bióloga marina y responsable del Área de Biodiversidad de Greenpeace.
“Tenemos que proteger de manera efectiva esta maravillosa fuente de riqueza de nuestras playas”, ha concluido Inma Cuesta.