La Alianza por el Autoconsumo celebra el objetivo de 19 GW del PNIEC pero advierte de la necesidad de reformas ambiciosas para lograrlo
● La revisión del PNIEC fija un objetivo de 19 GW de autoconsumo a 2030, que requiere casi triplicar los 7 GW instalados actualmente
● El Plan debe acompañarse de reformas para desbloquear el autoconsumo colectivo y las comunidades energéticas
● Queda un largo recorrido para que el derecho a compartir energía se aplique de manera efectiva en España
● Las mesas de autoconsumo de la CNMC definieron prioridades y modificaciones que pueden incorporarse al RD 244/2019
La actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2023-2030 confirma el objetivo fijado en su revisión del año pasado, con los 19 GW de autoconsumo a 2030. Desde la Alianza por el Autoconsumo celebramos que el autoconsumo forme parte central de la estrategia de energía y clima de nuestro país.
No obstante, la fijación de este objetivo llega en un momento de gran dificultad para el sector. El año 2023 cerró con una caída en instalaciones del 32 % respecto a 2022, y del 54 % en el sector residencial. Hasta la mitad de 2024, las asociaciones sectoriales apuntan a una nueva caída del 26 %.
Respecto al autoconsumo colectivo, solo un 1 % de las instalaciones son colectivas, en un país en el que cerca del 70 % de las personas vive en pisos o edificios plurifamiliares, y las comunidades energéticas necesitan más apoyo para su despliegue efectivo en el territorio.
Estas cifras prueban que el modelo de autoconsumo que se estableció con el RD 244/2019 necesita seguir avanzando. El autoconsumo colectivo abre las puertas a nuevos modelos que permiten que más personas, y no solo aquellas que tienen un tejado, puedan acceder a los beneficios del autoconsumo y tener un rol más activo y empoderado en el sistema eléctrico.
Es también la puerta de entrada al derecho a compartir energía introducido por la reforma del mercado eléctrico europeo. Este derecho implica que toda persona debe poder vender o ceder los excedentes a otros consumidores, alquilar o ser copropietario de instalaciones y compartir energía dentro de sus comunidades. Incluso quienes no pueden permitirse invertir en paneles podrán consumir energía renovable de proximidad y reducir su factura.
Sin embargo, la compleja tramitación y los bloqueos de las distribuidoras continúan lastrando los proyectos de energía compartida. Como analizamos con detalle en nuestro informe Autoconsumo en España: diagnóstico, retos y propuestas se están acumulando retrasos de hasta 2 años en el autoconsumo colectivo, debido a los trámites injustificados, demoras en la gestión de expedientes y requerimiento técnicos desproporcionados que hacen demorar en exceso el plazo máximo de 2 meses que establece la ley.
Así mismo, cada vez son más los problemas en instalaciones ya existentes debido a la falta de inversiones y mantenimiento en la red de distribución. Es necesario que las empresas distribuidoras inviertan en la modernización de las redes, para garantizar el acceso y conexión y adaptarla al nuevo modelo energético de generación descentralizada y renovable, evitando así, problemas como las sobretensiones de la red que afectan directamente al buen funcionamiento de las instalaciones de autoconsumo existentes.
Para seguir avanzando en autoconsumo desde la Alianza proponemos lo siguiente:
- Incorporar las propuestas consensuadas en las Mesas del Autoconsumo de la CNMC con el sector y la sociedad civil. En especial aquellas que aceleren el desarrollo del autoconsumo colectivo y las comunidades energéticas.Modificar el RD 244/2019, de 5 de abril, para facilitar el trámite de activación del autoconsumo, puesto que su redacción actual es una de las principales barreras para las comercializadoras.
- Modificar la forma de retribución de las empresas distribuidoras para incentivar el autoconsumo colectivo. Es necesario dejar atrás el modelo de “cuantas más redes despliego, más cobro” y garantizar que la calidad del servicio y la agilización de los trámites necesarios para activar nuevas comunidades energéticas tengan mayor importancia.
- Desarrollar la figura del gestor del autoconsumo, figura clave para centralizar las gestiones y la comunicación con las distribuidoras y agilizar los trámites para activar los autoconsumos.
- Impulsar las comunidades energéticas con un marco facilitador mucho más ambicioso, que transponga al menos el contenido de las Directivas europeas. También se debería fomentar su participación en las futuras subastas, reservando cuotas específicas para los proyectos de energía compartida.
- Reconocer el derecho de todas las personas a autoconsumir y compartir la energía dentro de sus comunidades, ampliando el modelo actual de autoconsumo colectivo.
- Extender el límite de 100kW de potencia instalada a 450kW de capacidad de acceso para acogerse al mecanismo de compensación simplificada, lo que permitiría ampliar las ventajas de esta modalidad a mayor tipo de instalaciones.
- Extender la exención de solicitar el permiso de Acceso y Conexión a todas las instalaciones que inyecten menos de 15kW a la red, no solo aquellas con menos de 15kW de potencia instalada, lo que permitiría animarse a más ciudadanos a participar en esta forma de consumir energía.
- Aumentar la distancia máxima entre generador y consumo asociado/s a 5.000 metros, lo cual impulsaría el desarrollo del autoconsumo colectivo y las comunidades energéticas, ampliando el umbral de lo que actualmente se considera autoconsumo pues no existe una limitación física a la hora de compartir excedentes.
Sobre la Alianza
La Alianza por el Autoconsumo, sin forma jurídica y sin ánimo de lucro, está formada por más de 60 entidades que apoyan y fomentan el autoconsumo de energías limpias. Desde su creación en mayo de 2017 la Fundación Renovables ejerce la secretaría y coordinación de las actividades. La Alianza tiene una amplia representación de la sociedad civil y cuenta con la adhesión de las principales asociaciones de consumidores, ecologistas, empresariales y sindicatos.