Greenpeace ha analizado el problema de la sequía de forma global. Además de la falta de precipitaciones, la mala gestión del agua y el despilfarro también son las culpables de la actual escasez del agua y demanda medidas urgentes que prevean y mitiguen los efectos de la sequía.
Greenpeace también ha analizado los impactos medioambientales y sociales de la sequía.