Zaragoza, primera ciudad española que firma la Declaración “Dieta sana, planeta sano” de Greenpeace
- Es urgente que la firma de la Declaración se materialice en medidas concretas para adoptar una alimentación sana, donde predominen los alimentos de origen vegetal, ecológicos, locales y de temporada
- Greenpeace insta a otras ciudades como Barcelona, Madrid, Soria y Valencia a que también firmen la Declaración
El Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado esta mañana la suscripción de la ciudad a la Declaración “Dieta sana, planeta sano” por una política alimentaria responsable y sostenible de Greenpeace. Con la adhesión a esta declaración, la ciudad de Zaragoza se convierte en pionera en el país y asume el compromiso de fomentar una alimentación más sana para las personas y el planeta.
Actualmente, en España, el 80% de la población reside ya en urbes, así que las ciudades juegan un papel determinante en el futuro del planeta, siendo la alimentación un aspecto más decisivo cada día. La Declaración a la que se une hoy Zaragoza es una pieza del proyecto Neopolitan de Greenpeace, a través del cual se ha retado a diez ciudades españolas a convertirse en sostenibles.
Las personas y entidades que firman esta Declaración apoyan:
- Una transición alimentaria hacia un modelo menos cárnico donde predominen los alimentos de origen vegetal y diversificados que provengan de cadenas de valor de calidad y sostenibles (ecológicos y locales);
- El impulso de la oferta de opciones vegetarianas diarias en los comedores públicos;
- El establecimiento de un día a la semana en los comedores públicos, en el que solo se ofrecen alimentos de origen vegetal y de dos días a la semana hasta 2020;
- El establecimiento de criterios de reducción del consumo de carne en las políticas de compra pública y el apoyo de los productos ecológicos y locales;
- El desarrollo de programas de educación sobre alimentación sana y sostenible y su integración en el currículo escolar de Educación Primaria y Secundaria;
- La petición a los organismos públicos que orientan sobre las frecuencias de consumo de carne en comedores públicos, para que recomienden como máximo una o dos raciones semanales;
- Ayudar a disminuir el desperdicio alimentario
“Lo que coman los niños y niñas en su infancia marcará profundamente sus hábitos alimentarios. Y su salud está intrínsecamente unida a la salud del planeta, su casa común.” ha declarado Luís Ferreirim, responsable de la campaña de agricultura de Greenpeace. “La mayoría de las ciudades tienen bajo su responsabilidad la alimentación de los comedores escolares públicos infantiles. La adhesión de Zaragoza a la Declaración ‘Dieta sana, planeta sano’ de Greenpeace es una excelente noticia y un importante paso en la buena dirección. Ahora queremos ver medidas concretas, que pongan en práctica lo planteado en el documento.”
Esta Declaración surge en un momento de creciente preocupación sobre las repercusiones de la producción y el consumo actuales de carne en nuestra salud y en la del planeta y sobre la necesidad urgente de reducir su elevado consumo. España es el segundo mayor consumidor de carne de la UE con más de 90 kg por persona al año, según los últimos datos disponibles de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), lo que nos sitúa muy por encima de las recomendaciones nutricionales y tiene graves consecuencias para la salud y el medioambiente.
En la Declaración, se plantean las consecuencias directas de este consumo desmesurado de carne y otros derivados animales:
–para el clima (la ganadería es la responsable de la emisión del 14,5% de los gases de efecto invernadero)
–para la biodiversidad, los recursos hídricos y el aire
–para nuestra salud (aumento de resistencia a los antimicrobianos debido a su uso masivo en la ganadería industrial, propagación de enfermedades de origen animal y transmisibles a los seres humanos -como la gripe aviar y porcina o la enfermedad de las “vacas locas”- y el mayor riesgo de padecer cáncer, enfermedades cardiovasculares o diabetes)
–y para el bienestar animal
Por otro lado, cabe destacar que entre el 75% y el 80% de la superficie agrícola mundial se destina a producir alimentos para animales, no alimentos para consumo directo humano.
“En un escenario de cambio climático, pérdida de biodiversidad, contaminación y uso excesivo de agua, abandono del campo, incremento de personas con obesidad y sobrepeso, incremento de la resistencia a los antimicrobianos, maltrato animal, abandono rural… etc. la alimentación surge como una poderosa herramienta para provocar cambios inmediatos en la actual situación. Una dieta donde predominen los alimentos de origen vegetal, ecológicos, locales y de temporada es la mejor para nuestra salud, pero también para la del planeta. Todas las ciudades son más que bienvenidas a este cambio y esperamos que sigan los pasos de Zaragoza, firmando la Declaración de Greenpeace por una alimentación responsable y sostenible” ha concluido Ferreirim
La Declaración ya ha sido firmada también por cerca de 60 profesionales del sector de la alimentación, nutrición, enseñanza, entre otros, así como por entidades como ALMOCAFRE S.C.A. Coop Consumidores, AnimaNaturalis Internacional, Asociación Cultural Gamonal Vetón, Associació Animalista LIBERA!, Del Campo al Cole, FAADA (Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales), La Ecocosmopolita · Usar y Reusar, Plataforma Cívica de Gamonal, ProVeg España, Te lo sirvo verde, Unión Vegetariana Española.
Desde Greenpeace animamos a otros profesionales, entidades y ciudades a que sigan sumándose para fortalecer el movimiento y generar cambios, cada vez más necesarios.