Ya hemos visto cómo las Zonas de Bajas Emisiones pueden ser una medida efectiva, pero también un tremendo fiasco. Todo dependerá del nivel de ambición que tengan las ciudades cuando definan cómo serán sus zonas.
Y dado que las directrices fijadas por el Ministerio de Transición Ecológica no son vinculantes, y los mínimos criterios fijados en el Real Decreto tienen carencias, nos corresponde a las organizaciones sociales y ambientales velar por una adecuada implantación de estas nuevas zonas que asegure el cumplimiento de los objetivos propuestos.
Desde Greenpeace estamos trabajando activamente para que las ZBE que veamos en 2023 sean efectivas:
Tú también puedes colaborar en esta tarea y ayudarnos a llegar a cuantas más ciudades, mejor. Basta que tengas algún rato libre para poder informarte de qué se va a hacer en tu ciudad y pedir a tu ayuntamiento que sean ambiciosos a la hora de implantar su ZBE.
Desde el voluntariado de Greenpeace trabajamos con numerosos municipios a través de nuestros Grupos Locales. Si todavía no eres voluntario/a, únete a Greenwire, nuestra plataforma del voluntariado, y busca las actividades sobre movilidad que tenemos en tu ciudad.