El control de WhatsApp de forma externa es complicado ya que supone acercarse a un ámbito muy privado. Por eso cada persona tiene que estar atenta a qué recibe para que no «nos la cuelen».
El propio WhatsApp ha planteado iniciativas para frenar la deinformación, como limitar el reenvío de mensajes y eliminar cuentas que violen sus términos y condiciones de uso. Por su parte, la Unión Europea también ha instado a WhastApp y otras platasformas a elaborar códigos de buenas prácticas que eviten la desinformación. También hay iniciativas privadas que verifican la información y la desmienten, lo que se conoce como “fact-checking”. Y se están incluyendo asignaturas en los institutos sobre periodismo y fake news.
Pero como WhatsApp pertenece al ámbito privado, es en el ámbito privado donde más se puede luchar contra la desinformación. En resumen, evaluar la información que recibes depende de ti. Para ello te damos algunas recomendaciones:
#1
Si es demasiado coloquial, desconfía
A menudo las noticias falsas tienen titulares llamativos o sensacionalistas. Utilizan adjetivos o calificativos, mayúsculas e incluso signos de exclamación. Cuanto más coloquial sea el lenguaje más probabilidad de que sea falsa.
#2
Si ningún otro medio la reproduce, desconfía
Identifica los bulos pegando el titular o texto el Google para ver cuántas entradas existen y qué medios o webs hablan del tema. Si es verídica la encontrarás en más medios y en prensa escrita independiente.
#3
Si dan por actual una noticia vieja, desconfía
Mira la fecha, divulgar noticias antiguas en un nuevo contexto también es desinformación porque no está actualizada. El lugar o las cifras también son fáciles de corroborar.
#4
Si no conoces la fuente, desconfía
La fuente es clave. Distingue opinión de información, si se trata de un tuit mira el perfil del autor en Twitter, si es un texto de Whatsapp sin enlaces o pidiendo difusión tiene todas las papeletas para ser falso, aunque te lo envie una persona de confianza.
#5
Si la fuente es tendenciosa, desconfía
Desconfía si viene de plataformas que ya hayan sido acusadas de difundir noticias falsas, como los que han destacado en nuestra investigación (Mediterráneo Digital, Okdiario y Libertad Digital).
#6
Chequéala con una plataforma de verificación
Existen plataformas de fact-checking que ya pueden haber desmentido esa información. En España, Newtral o Maldita, forman parte de la International Fact-Checking Network, una red que promueve la verificación no partidista. Para temas de ecologismo o medio ambiente consulta la biblioteca de desmentidos de Greenpeace o pregúntanos directamente.
#7
Si refuerza tus creencias, desconfía
Sé crítico/a. A menudo es muy apetecible leer cosas que atacan a nuestros «adversarios», pero en esos momentos es donde somos más vulnerables a creernos información falsa. Ten en cuenta tus creencias y prejuicios a la hora de evaluar las noticias que «te dan la razón».
#8
Comprueba las imágenes
Comprueba si una imagen ha sido manipulada, retocada o desviado su origen usando images.google.com o haciendo clic derecho en esa imagen (en Chrome) y seleccionando “Buscar imagen en Google”.
#9
Comprueba los audios y vídeos
Para audios y vídeos tendrás que sintetizar su mensaje y buscar también por palabras clave. Si su intención es humorística o alarmista, analiza qué sensaciones despierta en ti (risa, odio, violencia) y si es algo a tomar en serio.
#10
Si dudas, no compartas
Así no contribuyes a su difusión ni a viralizar mensajes que muchas veces se comparten con el conocimiento previo de que son falsos.