Entrada de blog por Nanqui Soto - 21-03-2020


Menos bosques, más enfermedades

El sida, la gripe A, el ébola y, ahora, el coronavirus. Cada cierto tiempo, un nuevo brote de una terrible enfermedad pone en jaque a la humanidad. Sus orígenes son diversos pero hay un factor que claramente está aumentando el riesgo de transmisión de este tipo de enfermedades: la pérdida de bosques y el deterioro ambiental.

Día Bosques

Día Bosques

En el Día Internacional de los Bosques, que se celebra hoy, conviene recordar que la tala y la deforestación, en particular en los bosques tropicales como el Amazonas y el Congo, está permitiendo que los seres humanos entren en contacto con poblaciones de fauna silvestre portadoras de virus, bacterias y otros microorganismos a los que generalmente los seres humanos no habían estado expuestos. El resultado es un incremento de las llamadas enfermedades zoonóticas (que proceden de los animales).

En los últimos 50 años, ha habido un gran aumento de las enfermedades emergentes que se han atribuido a la invasión humana del hábitat, en particular en los «puntos calientes» de las enfermedades en las regiones tropicales. Un estudio de USAID afirmó que alrededor del 30% de los brotes de enfermedades como el virus Nipah, Zika y el Ébola están relacionados con el cambio de uso de la tierra.

Gestionar los recursos para evitar futuras crisis

Los bosques nos ofrecen servicios de un valor incalculable. Por eso tenemos que ser conscientes de que vivimos en un planeta que tiene límites y de la necesidad de gestionar correctamente los recursos naturales que nos ofrece. Si no lo hacemos, las crisis (sanitarias, climáticas o migratorias) serán más frecuentes por el colapso sistémico al que nos abocamos.

Pero los datos nos dicen que no vamos por muy buen camino. Según la organización Global Forest Watch, desde 2001 a 2018 se ha producido una pérdida de 361 millones de hectáreas de cubierta arbórea a nivel mundial, lo que supone una reducción del 9 % de esa superficie desde el año 2000.

¿Qué está pasando? Cada vez más bosques se están talando para cultivar materias primas altamente demandadas como la soja, el aceite de palma, la pasta de papel o el caucho. También el actual consumo de carne tiene mucho que ver con la deforestación, ya que gran parte de los cultivos de soja se destinan a la alimentación del ganado. España es líder en la producción de piensos ganaderos y en importación de soja dentro de la UE. En 2017 el 40% de la soja importada procedía de Brasil y el 32 % de Argentina.

Prevención, prevención, prevención

Desde Greenpeace nos solidarizamos con las familias de las personas fallecidas y con las afectadas por el COVID-19, prioridad absoluta en este momento y recordamos que es importante seguir poniendo de relieve estas realidades, por lo que puedan generar en términos de prevención a futuro.

El principio de precaución es una herramienta fundamental para minimizar los daños. Las políticas preventivas evitan la pérdida de vidas humanas y reducen los altos costes económicos de estas crisis. Así como un buen sistema de salud público es vital para asegurar una cobertura a toda la población, un medioambiente saludable, con recursos naturales como los bosques bien gestionados, son una salvaguarda para hacer comunidades más resilientes a estas crisis.

Nanqui Soto - autor del blog.
Nanqui Soto
Licenciado en Biología por la Universidad Complutense de Madrid, Postgrado en Ordenación del Territorio por la Universidad Politécnica de Valencia y Diplomado en Educación Ambiental por la UNED. Responsable de las campañas de Bosques y Empresas y DDHH en Greenpeace España. Twitter: @NanquiSoto
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Comentarios

9 comentarios
Felipe 21/03/2020

Grandioso artículo. Felicidades Nanqui

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Greenpeace España 23/03/2020

¡Muchas gracias, Felipe!

Sergio 21/03/2020

Hola. Buenos días hablo desde Guadalajara Jalisco México...

Al igual que ustedes estoy preocupado por los daños causados por el corona virus, estamos siguiendo las indicaciones correspondientes y esperemos salir a flote de esta crisis.

La tala a nivel mundial puede llegar a detenerse?? Los políticos de cada país pueden hacer algo respecto a la deforestación y quema de zonas verdes pero no lo hacen pues deja millones de pesos , euros dólares y cualquier otro valor monetario. El aire el agua todo recurso natural se está agotando...

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juani.mr0565@gmail.com 22/03/2020

Mientras no se le dé el valor real a los bosques siempre estará en el segundo plano. Por otro lado los gobernantes no se arriesgan a gobernar sin los impuestos que llegan de la minería.

Greenpeace España 24/03/2020

Hola Sergio. La deforestación debe detenerse y puede hacerse, no se puede seguir destruyendo los bosques. Pero la explotación de los recursos forestales no y tampoco es deseable. Los bosques ofrecen servicios ambientales y bienes que son fundamentales para la vida y también para sustituir materiales muy contaminantes (hormigón, acero, aluminio...) por la madera, que es un material perfecto si procede de bosques bien gestionados. Los productos forestales de bosques bien gestionados son materiales renovables, biodegradables y con un ciclo de vida óptimo

SILVIA TERRONES CONDE 26/03/2020

Gracias

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Greenpeace España 27/03/2020

¡A ti Silvia!

Juan Josè 01/04/2020

Gracias por recordar que la destrucción de las selvas esta detrás de esta pandemia. Casi nadie hable de ello.
Habría que añadir que sin la desorbitante movilidad aérea no se generaría una pandemia.
Este virus se ha dispersado con los usuarios de los aviones.

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Eduard Mondejar 15/04/2020

Gran artículo!
Adjunto un enlace a otro artículo que demuestra la relación existente entre las macrogranjas, principalmente situadas en China. También muy bueno y con una estrecha relación con el tuyo, ya que vincula el modelo económico depredador imperante en el mundo occidental y las epidemias. Aquí va: https://www.eldiario.es/interferencias/Causalidad-pandemia-cualidad-catastrofe_6_1010758925.html

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