El cambio climático constituye la mayor amenaza medioambiental a la que se enfrenta la humanidad. La crisis climática está dejando una huella devastadora: olas de calor, sequías, incendios... No es un problema del futuro, es una emergencia presente. Pero aún podemos actuar. Desde Greenpeace pedimos a gobiernos y empresas un cambio real. Tu apoyo es clave.
Qué es el cambio climático y por qué es una crisis
El cambio climático es la modificación de la temperatura y del resto de variables del clima, que se está produciendo con una velocidad e intensidad sin precedentes en la historia de la humanidad, como consecuencia de la actividad humana.
Está ocurriendo en todo el mundo y sus consecuencias ya están siendo devastadoras, tanto para el medio ambiente como para las personas. La actividad humana, principalmente la quema de combustibles fósiles que generan gases de efecto invernadero, es la causa detrás de esta grave amenaza medioambiental, la mayor a la que se enfrenta la humanidad, junto a la crisis de biodiversidad.
El impacto del cambio climático
Los impactos del cambio climático y el calentamiento global ya son perceptibles y quedan puestos en evidencia por datos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) como:
- La temperatura media mundial en 2024 ha aumentado ya 1,55 ± 0,13 °C desde la época preindustrial, siendo el primer año natural en el que ha superado en más de 1,5 °C la media del período 1850-1900 y el año más caluroso desde 1850.
- El calentamiento global a largo plazo (la media de los últimos 30 años) se sitúa en 2024 1,3 °C por encima del valor de referencia del período 1850-1900. Este es el valor al que se refiere el límite de 1,5ºC del Acuerdo de París.
- Los diez años transcurridos desde 2015 son los más cálidos de los que se tienen datos.
- Las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel global siguen aumentando cada año, alcanzando el máximo de 41,6 gigatoneladas (GT) CO2 eq. en 2024, frente a los 40,6 GT CO2 eq. del año pasado. Esto incluye las emisiones de CO2 de origen fósil (37.4 GT) y por cambios de uso de la tierra ( principalmente la deforestación)..
- Como consecuencia, el 7 de marzo de 2025, la concentración CO₂ diaria en la atmósfera alcanzó por primera vez las 430 partes por millón, medida por la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos en su observatorio de Mauna Loa, en Hawai, máximo histórico, una cantidad de CO2 que no se registraba desde hace tres millones de años. Entre 2023 y 2024, la concentración de CO₂ en la atmósfera aumentó en 3,5 ppm, el mayor incremento anual desde que hay registros.
- El contenido calorífico de los océanos ha alcanzado niveles sin precedentes. En algún momento de 2021, gran parte del océano se vio afectado por al menos una ola de calor marina «intensa».
- El nivel medio del mar a escala mundial alcanza cada año un nuevo máximo, tras aumentar una media de 4,5 mm anuales durante el período 2013-2021. Esta cifra es más del doble que la registrada entre 1993 y 2002. La tendencia sigue acelerándose: en 2024 aumentó 5,9 mm.
¿Cómo afecta el cambio climático a tu salud y economía?
Pero hoy también estamos viendo cómo se manifiestan con mayor intensidad los impactos del cambio climático:
- Los fenómenos meteorológicos extremos, como danas, tormentas y huracanes. La Dana del 29 de Octubre de 2024 en Valencia ha supuesto un antes y un después en la respuesta de adaptación al Cambio climático en España.
- Olas de calor más intensas, duraderas y frecuentes que nunca antes.
- Mega-incendios.
- Las sequías.
Esos impactos provocan a su vez daños económicos y sociales, que serán cada vez más graves, como daños en las cosechas y en la producción alimentaria o riesgos en la salud.
En los peores escenarios probables que los expertos reflejan, el aumento de temperatura podría llegar a los 4,8 ºC para final de siglo. El cambio climático es un problema global que alcanza una perspectiva ambiental, política, económica y social en la que las peores previsiones también implican enormes pérdidas económicas. Y es que cuanto más tardemos en actuar, mucho más elevadas serán las inversiones para la adaptación al aumento de la temperatura y puede llegarse a un límite en que la adaptación ya no sea posible.
¡Firma! Exige justicia ante la emergencia climática
El 79% de las emisiones de gases de efecto invernadero en la Unión Europea son debidas a la quema de combustibles para usos energéticos o de transporte, según datos de Eurostat.
España, junto con otros cinco países de la Unión Europea, acumulan alrededor del 66% de las emisiones de todos los gases de efecto invernadero del continente.
«El cambio climático es una realidad que ya va a tener implicaciones inevitables, pero aún podemos minimizar sus consecuencias más severas»
Exigencias clave a gobiernos y empresas
El sector energético, debido a su uso de energías sucias —petróleo, carbón y gas—, es uno de los mayores contribuidores al calentamiento global. Unas 90 empresas son responsables de casi las dos terceras partes de las emisiones mundiales. Solo 20 de ellas, todas dedicadas a los combustibles fósiles, emiten el 35% de todos los gases de efecto invernadero del mundo.
En concreto, la empresa española más contaminante es Repsol, cuyas emisiones declaradas suponen el 62% de todo el Ibex y está entre las 50 peores del mundo. Pero, lejos de detenerse, en el último año, aumentó un 9% la extracción de petróleo y el 82% de sus inversiones para el futuro siguen vinculadas a los fósiles.
Los combustibles fósiles son la principal causa del cambio climático, y mientras la industria fósil obtiene beneficios obscenos cada año, la ciudadanía sufrimos los peores impactos de a crisis climática, como ha ocurrido con la Dana de Valencia. Por eso tenemos que conseguir que la industria fósil pague por el daño que están provocando mientras caminamos hacia el fin del uso del carbón, gas y petróleo.
En España, las grandes eléctricas —Endesa, Iberdrola, Naturgy, EDP y Viesgo— siguen generando buena parte de su electricidad usando fuentes no renovables, por eso trabajamos para que este modelo insostenible cambie y se acelere la transición a un sistema energético eficiente, inteligente, 100% renovable y democrático.
La revolución energética en manos de la ciudadanía es el camino. Con las energías renovables, el ahorro y eficiencia energética, la electrificación, la gestión de la demanda, la integración y la inteligencia, una profunda reforma del sistema eléctrico y del transporte se conseguirá paliar los efectos del cambio climático, generar puestos de trabajo y reducir los costes de electricidad. Necesitamos prescindir de los combustibles contaminantes y de la energía nuclear y aumentar la participación de la ciudadanía para que se beneficie de la transición renovable.
Nuestro plan de acción para la emergencia climática
La inacción no es una opción. En Greenpeace trabajamos para impulsar soluciones que consigan frenar el cambio climático, y esto significa:
- Frenar los combustibles fósiles y la energía nuclear: poner fin a los nuevos proyectos de gas y acelerar la transición a un modelo renovable, justo y distribuido.
- Apostar por una movilidad sostenible: invertir en transporte y apoyar políticas y tratados internacionales para reducir las emisiones mundiales.
- Promover la justicia climática: proteger a los colectivos más vulnerables de los impactos de la crisis.
Para lograrlo, trabajamos para denunciar la falta de ambición climática de los gobiernos, acabar con el poder de las empresas de combustibles fósiles, impulsar las energías renovables en manos de la ciudadanía, reformar en profundidad las reglas del mercado eléctrico que favorecen a las grandes compañías, conseguir una movilidad sostenible para todas las personas, transformar las ciudades y darle la vuelta al sistema con una recuperación verde y justa.
¡Tu ayuda es clave!
Tu firma multiplica el impacto. ¡Exige justicia frente a la emergencia climática! Los sucesivos gobiernos de España no han estado a la altura del desafío climático. Y están poniendo en riesgo nuestro planeta y su futuro. Súmate a la lucha por el clima.
¡Actúa con tu consumo! Adoptando unas sencillas medidas de eficiencia energética en tu casa ahorrarás dinero y contribuirás en la lucha contra el cambio climático.
¡Súmate a Greenpeace! Sé parte de nuestra organización para exigir a gobiernos y empresas que adopten políticas y prácticas sostenibles. Donde una persona no llega, un colectivo sí. Dona y apoya la lucha contra la crisis climática. Somos totalmente independientes. El 100% de nuestros fondos proviene de gente como socios y donantes individuales.